miércoles, 2 de agosto de 2017

Por 13 razones (13 Reasons Why)


Por 13 razones es una serie original de Netflix, creada por Brian Yorkey, basada en la novela homónima de Jay Asher. Está protagonizada por: Dylan Minnette, Katherine Langford, Christian Navarri, Alisha Boe, Brandon Flynn, Kate Walsh, entre otros.


Hannah Baker
Por trece razones narra la historia de Hannah Baker (Katherine Langford),  más que su historia, la historia de por qué se suicidó. Las 13 razones que la llevaron a cometer el gran error de su vida.

Hannah antes de suicidarse deja una serie de cintas en las que explica cada una de esas razones y nombra a todos aquellos que la humillaron durante un año entero. 

Esas cintas van pasando de uno en uno hasta que llegan a Clay Jensen (Dylan Minnette) y es cuándo nosostros comenzamos a conocer la historia de Hannah Baker.

Y ¿por qué lo conocemos a través de Clay? Porque se trata del chico bueno del instituto, el friki, el chico listo, el compañero de clase y trabajo de Hannah, el chico que está enamorado de ella y no se atreve a decírselo, el único que jamás la haría daño. Entonces, ¿por qué él recibe las cintas? ¿Por qué Hannah le mete dentro de sus 13 razones?

Hannah y Clay en un descanso del trabajo
Ese es uno de los enganches de la serie, el no entender por qué este chico es uno de los responsables de su muerte.

Otra de las razones por las que te engancha, obviamente, es comprender qué le llevó a Hannah Baker tomar esa drástica decisión, puesto que el suicidio nunca debe de ser una opción.

La serie tiene sus más y sus menos, hay capítulos más intensos y otros que sobran. Empieza muy fuerte, a mitad baja bastante el ritmo y al final vuelve a remontar.

La historia está bien, me ha gustado, las razones de Hannah, algunas de ellas, no todas, pueden parecer tonterías. En un principio nos choca que eso la lleve al suicidio, pero en una mente frágil, en una persona que sigue creando su autoconcepto, en una época en la que cada cosa pequeña que ocurre se convierte en un problema enorme. Sobre todo en los institutos, en los que la imagen es lo primordial, sin reputación no eres nadie, en la que los chicos populares mandan y en el que las chicas populares buscan todos los medios para no perder su estatus, y en medio está el resto, los que luchan por ser aceptados por los que "mandan" en el instituto.
Bryce, Justin, Zach y otros compañeros riéndose de una foto comprometedora de Hannah Baker

La serie trata temas muy serios: suicidio, acoso escolar, abuso de sustancias, abuso sexual, familias desestructuradas, maltrato etc. Es por ello que la serie es para mayores de 16 años, pero la verán adolescentes de menor edad y por ello es necesario que entiendan qué están viendo y las consecuencias de cada uno de los actos que se comenten en la serie, desde los más leves hasta los más graves. Porque todos, todos nuestros actos tienen consecuencias, el hacer algo bien, mal o no hacer nada tiene sus consecuencias y tenemos que ser responsables con ello.

A lo largo de los 13 capítulos trata todos estos temas con la dureza que hay que tratarlos para empatizar al máximo con las situaciones. Aunque hay partes de la serie que no me gustan como las conspiraciones entre compañeros para que las cintas no salgan a la luz y con ello sus secretos, en estilo mafiosos con amenazas y agresiones. No creo que eso sea lo más educativo en una serie que pretende inculcar una serie de valores a los más jóvenes.

En cuanto, a las actuaciones quiero resaltar dos que me han gustado mucho: Kate Walsh que interpreta a la madre de Hannah, que está maravillosa, sabe trasladar muy bien el sufrimiento de una madre que ha perdido a su hija de una manera tan traumática y que intenta entender por qué su hija ha tomado esa decisión, además de buscar justicia por el acoso escolar sufrido, y Brandon Flynn que interpreta a Justin Foley, uno de los culpables del acoso que sufría Hannah y que ha sabido interpretar muy bien la evolución e historia de su personaje.

Porque la serie no se centra solo en Hannah y Clay, sino que conocemos las historias y vivencias del resto de personajes.

Hannah en el momento del suicidio

Hannah Baker no es una heroína, no es una persona a la que imitar. Ella se suicida y el propósito de sus cintas es contar su historia, haciendo daño a aquellos que la han herido, es una especie de venganza final, acto que también tiene sus consecuencias buenas y malas, su propósito es generar sufrimiento a aquellos que la hicieron daño e incluso a los que no.

Es por ello, que la serie se debe ver acompañado de un adulto, que se hable de cada capítulo, que se genere un debate constructivo de cada uno de los personajes, de cada una de las acciones, de cómo llegan a comportarse de esa manera, comprender por qué actúan así, aunque hay comportamientos que nunca tienen justificación y que deben ser denunciados y castigados. Hay que intentar en cada uno de esos debates generar soluciones a cada uno de los problemas, ver qué podemos hacer para evitar las actuaciones de acoso, sea como sea este acoso.

El acoso escolar es un tema muy grave con el que muchas personas (niños, adolescentes y adultos) sufren día a día en escuelas, institutos y universidades. Es un tema delicado en el que todos tenemos que poner de nuestra parte, en el que la víctima debe sentirse apoyada y no culpable de lo que está ocurriendo. 

Las escuelas deben mostrar apoyo y solucionar el problema, y no taparlo (como ocurre en este caso), los padres tienen que tener una comunicación fluida con sus hijos desde que estos son pequeños, las confianza no se gana de un día para otro, los compañeros tienen que denunciar los comportamientos de acoso, que no es chivarse, es denunciar un acto que no debe cometerse. 

Además debemos potenciar la educación emocional tanto en las escuelas como en casa, que los niños desde que son pequeños aprendan a reconocer las emociones y a gestionarlas, algo que es muy importante en un mundo tan competitivo y frustrante como en el que vivimos hoy en día.

El acoso escolar siempre ha existido, pero ahora con las tecnologías con las que nos comunicamos este ya no acaba cuando salen de la escuela sino que sigue en casa. A través de los chats, las redes sociales, los móviles e incluso los chats que se generan en los videojuegos  Ese mundo digital en el que la palabra puede hacer mucho daño, en el que tenemos que estar muy atentos a lo que hacen nuestros hijos, nuestros alumnos. 

Los adultos debemos enseñarles a utilizar la tecnología, y no sirve la excusa de que no existía en mi generación y no sé cómo se usa. Si ellos han aprendido, vosotros también. Es cuestión de investigar y ponerse a ello. Hay que hablar, comunicarse, inculcar valores, atender a los niños y no dejarlos aparcados. Ser conscientes de nuestro papel en su vida y en su mundo.

Antes de finalizar, quiero recalcar que el suicidio no es una solución, que siempre hay luz al final del túnel y que hay medios para superar los problemas a los que nos enfrentamos a diario. Lo único que consigues con ese fin es perderte una vida maravillosa, en la que te esperan un montón de cosas buenas y crear un sufrimiento innecesario a las personas que más te quieren es esta vida.
Los padres de Hannah Baker sufriendo por la decisión de su hija

Si sufres acoso escolar/ciberacoso ponte en contacto con las autoridades, busca ayuda, cuéntaselo a tus padres, a tus tutores, etc.

En España, contamos con un teléfono en el que pedir ayuda. Este teléfono está disponible para alumnos, padres, equipos docentes, etc. El teléfono es  900 018 018 y en este enlace https://www.mecd.gob.es/prensa-mecd/actualidad/2016/10/20161020-telf.html encontraréis toda la información al respecto de este servicio. No os preocupéis porque las llamadas no salen en la factura y son gratuitas. Podéis llamar con toda confianza ya que seréis atendidos por profesionales.
Recordad que la policía y la guardia civil están presentes en las redes sociales, y que podéis poneros en contacto de manera privada con ellos pidiendo ayuda y consejo.

Y los padres y maestros debemos recordar que no son cosas de críos, que un pequeño insulto puede hacer mucho daño. Así que hay que inculcar el respeto por los demás sea cual sea su aspecto físico, condición sexual, ideología, religión, etc. Nosotros somos los principales responsables de su educación y debe cundir el ejemplo. Nuestras acciones son lo que ellos aprenden, por lo que cuidado con lo que se dice y opina delante de los niños.



Lo mejor: El mensaje que quiere transmitir.

Lo peor: Algunas actuaciones de los personajes, lentitud de algunos capítulos.

Nota: 7.5

1 comentario:

Fran dijo...

Muy buen análisis crítico de la serie, y excelentes consejos :)